Do prestigiado Jonal espanhol "ABC" retirámos o seguinte artigo:
Un Antipático contra todos
"El primer ministro portugués se parece a un conductor que avanza a toda velocidad por la autopista en dirección contraria, convencido que son todos los demás automovilistas los que se equivocan.
Los gobiernos europeos y las instituciones comunitarias dan por hecho que Portugal no puede salir de la crisis sin asistencia financiera, pero José Sócrates les contradice a todos diciendo que que el país puede superar sus problemas con sus propias fuerzas.
Después de ser derrotado en el Parlamento ha presentado su dimisión y ha lanzado a su partido, el socialista, de frente y a toda velocidad contra la oposición liberal-conservadora, esperando que en el último momento un volantazo de buena suerte le permita dar la vuelta a las encuestas y regresar victorioso.
En la última cumbre europea de Bruselas, este viernes, sorprendió a muchos cuando se dedicó a saludar estrechando la mano a todos los periodistas antes de sentarse a explicar su versión de lo que había sucedido en el Consejo.
Dada su proverbial fama de antipático, el gesto podía interpretarse como una especie de despedida, teniendo en cuenta que para la próxima cumbre es posible que las elecciones le hayan devuelto a la oposición. «Puede tener usted la seguridad de que no me estoy despidiendo» aclararía después, «aunque estoy seguro de que en su periódico es lo que están deseando».
Sócrates no solo conoce perfectamente todo lo que se dice sobre él en los diarios de Lisboa (y por lo que se ve también de algunos de Madrid) sino que está convencido de que gran parte de sus problemas vienen del hecho de que no siempre cuentan las cosas del modo que más le gustaría.
En la misma comparecencia atacó sin mucho disimulo las preguntas incómodas, a pesar de que coincidían con la opinión que estaban expresando los demás jefes de Gobierno en salas contiguas: «lo que causa la especulación son preguntas como las que me están haciendo. Portugal no necesita ninguna ayuda y si lo que se quiere es parar los movimientos especulativos, es infantil creer que eso sucederá si pedimos ayuda».
Portugal deberá hacer frente al vencimiento de una serie de paquetes de deuda por valor de 9.000 millones de euros en los próximos tres meses, en plena campaña electoral, forzada precisamente porque Sócrates no logró que el Parlamento aprobase el plan de recortes de gastos que había pactado con las instituciones comunitarias.
Desde que el líder socialista es primer ministro, la deuda del país ha ido aumentando de forma vertiginosa. Solo en 2010 tuvo que pedir 51.000 millones de euros, un treinta por ciento más que el año anterior, y un 50 por ciento más que el precedente. Los intereses que tiene que pagar por los nuevos préstamos son cada vez más altos y las últimas subastas han estado rozando —por arriba—l 8 por ciento de interés. Sin embargo, Sócrates asegura que tiene dinero para pagar estas obligaciones, cuya amortización rebajaría sustancialmente la presión financiera sobre el país.
Para creer a Sócrates hay que hacer abstracción de las partes más importantes de su biografía. No solo que empezase su carrera política como fundador de las juventudes del Partido Social Demócrata (conservador), sino porque, ya militante socialista, su escasa carrera privada en el sector de la construcción en los años 80 fue una de las más desastrosas de la época. Tuvo que retirarse porque el ayuntamiento de la ciudad de Guarda, para el que trabajaba, lo destituyó por unanimidad antes de que lle lloviesen las demandas por la escasa calidad e sus proyectos.
Su escandalosa manera de hacerse con una licenciatura como ingeniero teniendo en cuenta que cuatro de las cinco asignaturas las impartía un profesor al que luego otorgó un cargo importante en el Gobierno y la quinta el propio rector de una universidad privada de Lisboa que acabó siendo cerrada precisamente por el cúmulo de irregularidades que aparecieron al investigar el escándalo, o que algunos de los pocos exámenes que constan en su expediente los enviaase por fax desde el despacho de primer ministro o que el título lleve fecha de expedición en un domingo, no le impidió aparecer en televisión defendiendo su honorabilidad y acusando a sus adversarios de inventarse un plan para perjudicarlo.
Sin embargo, de lo que ahora se trata es de dinero. De mucho dinero y de la posible quiebra de todo un país. El presidente del Eurogrupo, el luxemburgués, Jean Claude Juncker, ya le tiene hechas las cuentas a Sócrates y asegura que necesita un plan de rescate de más de 70.000 millones de euros para garantizar el pago de una deuda que, por cierto, está sobre todo en manos de bancos españoles.
Es imposible que no hayan hablado de esto en la reunión que Sócrates mantuvo el jueves con la canciller Ángela Merkel, que es finalmente la que tiene las llaves de la caja del mecanismo de ayuda finmanciera, pero Sócrates no quiso desvelar el contenido de la conversación: «me va a permitir que dejemos el contenido de esa entrevista en el ámbito privado entre la canciller Merkel y yo mismo».
Al menos esta vez a Merkel no le ha pasado como al líder de la oposición de Portugal, el conservador Pedro Passos Coelho, que después de unas experiencias espinosas con el aún primer ministro ha acabado por advertir que no se volverá a reunir con Sócrates «si no es en presencia de testigos»."
Para aqueles que tenham alguma dificuldade com o castelhano, aqui vos deixo uma tradução "bugalhónica" sobre o artigo do "ABC"
" O Primeiro-Ministro Português parece um condutor a toda velocidade que vai pela estrada em sentido oposto, e está convencidos de que todos os outros motoristas é que vão em sentido contrário. Os governos europeus e instituições da UE assumiram que Portugal não consegue superar a crise sem o apoio financeiro externo, mas José Sócrates, contraria-los todos, dizendo que o país pode superar os seus problemas com os seus próprios meios.
Após ser derrotado no Parlamento, pediu demissão, e lançou seu partido, o socialista, a toda a velocidade contra a oposição liberal-conservadora, esperando que, no último minuto e bafejado pela sorte, com uma pirueta, lhe seja permitido virar sondagens, e retornar vitorioso.
Na última cimeira europeia em Bruxelas, na sexta-feira, surpreendeu muitos quando se dirigiu a apertar as mãos para cumprimentar todos os jornalistas antes de se sentar para explicar a sua versão do que aconteceu no Conselho.
Dada a sua reputação habitual de antipático e agressivo, o gesto poderia ser interpretado como uma espécie de despedida, tendo em conta que na próxima cimeira, é possível que as eleições tenham sido ganhas pela oposição. Mas logo esclareceu: " Podem estar seguros que não me estou despedindo, embora eu tenha certeza de que o seu jornal é o que está querendo."
Sócrates não só está plenamente consciente de tudo o que é dito sobre si nos jornais de Lisboa (e pelo que se sabe, também em alguns de Madrid), como está ainda convencido, de que muitos dos problemas do país, vêm do facto de nem sempre as coisas serem contadas como ele gostaria.
Nessa mesma conferência, atacou sem disfarçar, as perguntas incómodas, embora elas concordassem com as opiniões que estavam expressando outros chefes de governo em salas adjacentes, ainda foi afirmando: "o que causa especulação são perguntas como as que estão fazendo. Portugal não precisa de qualquer ajuda, e se vocês querem acabar com a especulação, é infantil, acreditar que isso acontecerá se pedirmos ajuda. "
Portugal vai enfrentar, o fim de um número de “pacotes de dívida” no montante de 9.000 milhões de euros nos próximos três meses, em plena campanha eleitoral, precisamente porque Sócrates forçou o Parlamento não aprovar o PEC IV de gastos que tinham sido acordados com as instituições da UE.
Desde que o líder socialista é primeiro-ministro, a dívida do país tem vindo a aumentar drasticamente. Só em 2010 teve que pedir emprestado 51 mil milhões de euros, mais 30% face ao ano anterior, e 50% mais do que em 2009. Os juros que têm de pagar por novos empréstimos estão cada vez mais altos, e os mais recentes leilões atingiram os 8% de juros. No entanto, Sócrates alega ter dinheiro para pagar essas obrigações, cuja amortização ajudaria a reduzir, substancialmente, a pressão financeira sobre o país.
Para se credibilizar Sócrates, deve ter-se em conta as partes mais importantes da sua biografia. Não é apenas o facto de ter iniciado a sua carreira política como fundador da Juventude Social-democrata, mas também porque, e já como militante socialista, a sua fraca carreira privada no sector da construção na década de 80, foi um dos períodos mais desastroso da sua vida. Teve que se retirar da sua carreira, porque a Câmara do concelho da cidade da Guarda, onde trabalhou, e por unanimidade, o destituiu da nomeação, antes que chovessem reclamações pela má qualidade dos seus projectos arquitectónicos.
A maneira escandalosa como obteve o diploma de licenciatura de engenheiro, tendo em conta que quatro das cinco disciplinas foram ministradas por um professor que, em seguida, nomeou para um cargo importante no governo; e que a quinta foi ministrada pelo presidente de uma Universidade Privada em Lisboa, que acabou sendo fechada, precisamente pelo acumular de irregularidades que apareceram para investigar o escândalo, e que, alguns dos poucos testes que continha o arquivo o fax do gabinete do primeiro-ministro, e o diploma ostenta a data de emissão num domingo!... Tudo isto não o impediu, no entanto, de aparecer na televisão para defender a sua honra, acusando os seus adversários políticos, de arquitectarem um plano para prejudicá-lo.
No entanto, o que trata agora é de dinheiro, um monte de dinheiro e, o colapso potencial de um país inteiro. O presidente do Eurogrupo, o Luxemburguês, Jean Claude Juncker já fez as contas, e garante que Sócrates precisava de um auxílio de mais de 70.000 milhões de euros, para garantir o pagamento de uma dívida que, aliás, está nas mãos de bancos espanhóis.
É impossível que Sócrates não tenha falado sobre isso na reunião que realizou na quinta-feira com o chanceler Angela Merkel, que é, finalmente quem tem as chaves do cofre para accionar o mecanismo de apoio financeiro. Mas Sócrates recusou-se a revelar o conteúdo da conversa: "vão me permitir que eu mantenha o conteúdo da entrevista em privado entre a Chanceler Angela Merkel e por mim."
Pelo menos desta vez, não se passou com Merkel, como já se havia passado com o líder da oposição em Portugal, Pedro Passos Coelho, que após uma experiência difícil com o primeiro-ministro, tem vindo a denunciar, que não se reúne com Sócrates, sem a presença de testemunhas ".
Um comentário:
o Joaquim Letria também fez a parábola da auto estrada em relação à situação do país:
Sócrates parece aqueles velhinhos que se metem pelas auto estradas em contra-mão, com o Teixeira dos Santos no lugar do morto, a gritarem que os outros é que vêm ao contrário. De rabo entre as pernas, fartinhos de saberem que estavam errados, não conseguem agora disfarçar o mal que nos fizeram. Ainda estão a despedir-se, agradecidos, do Constâncio, e já dão a mão a Passos Coelho, que lhes jura que conhece uma saída perto e sem portagem. Estamos bem entregues! Vão-nos servindo a sopa do Sidónio, à custa dos milhões que ainda recebem da Europa, andam pelo mundo fora sem vergonha, de mão estendida, a mendigar e a rapar tachos, tratados pelos credores como caloteiros perigosos e mentirosos de má-fé. Quando Guterres chegou ao Governo, a dívida pouco passava dos 10% do PIB. 15 anos de Guterres, Barroso, Sócratese de muitos negócios duvidosos puseram-nos a dever 120% do PIB. Esta tropa fandanga deu com os burrinhos na água, não serve para nada e o estado do próprio regime se encarrega de o demonstrar. Falharam todas as apostas essenciais . Todos os dias se mostram incapazes. Mas com o Guterres nos refugiados, o Sampaio nos tuberculosos e na Fundação Figo, o Constâncio no Banco Central e o Barroso em Bruxelas, a gente foge para onde?
Postar um comentário